Recorre los canales de Venecia en temporada baja

Descubre la belleza de la misteriosa Venecia en invierno, cuando aún no se ha inundado de turistas, y al mismo tiempo, ahorra dinero. No te arrepentirás.

Venecia es una de las ciudades más visitadas de Italia, e incluso de Europa. Y no es de extrañar, pues su belleza es única y maravillosa.

Sin embargo, las mareas de turistas que surcan sus calles y canales a lo largo del año, pueden llevar al visitante a odiar la experiencia que supone visitarla.

Hoy, mi objetivo es ayudarte a enamorarte de ella, sin sufrir las desdichas que supone su fama mundial, y al mismo tiempo ahorrarte unos euros. Para ello, hay tres consejos básicos que puedes seguir:

• Visitarla en temporada baja.
• Pasear por ella cuando cae la noche y/o madrugar para ver salir el sol.
• Perderte por sus barrios o quartiere menos turísticos y más auténticos, si cabe.

A continuación, voy a elaborar estos puntos y darte consejos para sacar el máximo partido de tu visita de una forma relajada.

Cuándo ir: temporada baja

Venecia siempre está inundada de turistas. Da igual cuándo vayas, allí estarán. Pero existen determinadas épocas durante las cuales la afluencia de visitas es tan elevada que tu viaje puede convertirse en un infierno.

Esto es así, en especial, durante la primavera, pues el clima es más suave. En verano (junio, julio y agosto), además de miles de turistas, encontrarás temperaturas demasiado elevadas para realmente disfrutar de la ciudad. Así que evita, por lo que más quieras, esos meses.

En octubre, noviembre y diciembre, el lugar vive un momento más tranquilo, aunque es cuando más llueve en la región y son frecuentes las situaciones de ‘acqua alta’, en las que muchas calles y plazas se inundan debido a la subida del nivel del agua en la laguna. En las principales zonas, cuando esto ocurre, montan unas plataformas a modo de puentes para facilitar el tránsito.

El magnífico carnaval de máscaras de Venecia, en Febrero, también es temporada alta. Es un espectáculo digno de ver; sin embargo, la compañía que tendrás será, sin lugar a dudas, demasiada. Es importante evitar también fiestas nacionales, como el 25 de abril  (día de la liberación italiana), 2 de junio (fiesta de la república italiana) o 15 de agosto (ferragosto); junto con las festividades religiosas (pascua, etc.).

Mi recomendación personal es ir durante los meses de enero, febrero y principios de marzo, evitando fechas señaladas. De esta forma, compensarás las posibles inclemencias del clima con muchos menos turistas y precios más bajos en general. Para que te hagas una idea del tiempo que puedes encontrar, las fotos que puedes ver en esta entrada de blog fueron tomadas durante nuestro viaje a primeros de marzo del 2016.

Qué llevar en temporada baja

Durante estos meses de invierno, las temperaturas son bajas y el ambiente es húmedo. Aunque no son los meses más lluviosos del año, puedes encontrarte con días grises, tormentas y alguna que otra ‘acqua alta’. Por lo tanto, lleva suficiente ropa de abrigo, impermeable o paraguas, y zapatos resistentes al agua (como unas katiuskas, botas con tecnología Gore-Tex o similares).

Cómo llegar

Si viajas desde fuera de Italia, es posible que llegues en avión o transatlántico. Te desaconsejo encarecidamente esta última opción. Si llegas en un barco cargado miles de turistas a una ciudad de tan reducidas dimensiones, puedes olvidarte de disfrutar de ella de forma tranquila y sin multitudes. Casi ninguno de los consejos que voy a darte tendrá validez en ese caso, salvo que te pierdas por las zonas menos turísticas de la Venecia.

Si llegas en avión al aeropuerto de Marco Polo, puedes tomar un bus de línea (5) o el autobús azul de la compañía ATVO, mucho más rápido. Ambos te dejan en Piazzale Roma, puedes adquirir los billetes cuando llegues al aeropuerto y cuestan unos 6€. Existe la posibilidad de tomar un bus acuático, algo más caro, hasta la ‘Piazza San Marco’ con la compañía Alilaguna. También puedes tomar un taxi acuático, demasiado caro si no vas en grupos grandes (unos 100€ el trayecto).

Si aterrizas en el aeropuerto de Treviso, mucho más alejado que el de Marco Polo, tu mejor opción es comprar un billete de autobús al llegar con las compañías ATVO o Barzi Service. Ambos tienen precios y horarios similares, pero difieren en la duración del trayecto. En este caso destaca Barzi Sericve, ya que circula por autopista.

¿Aún no tienes vuelos? Entonces echa un vistazo a las ofertas en estos buscadores: Trabber, eDreams y Momondo.

Te recomiendo empezar la búsqueda en Trabber porque el precio que te muestra es final (incluye los gastos de tarjeta y otras tasas). Eso sí, compara siempre los resultados con el resto de páginas.

Nunca sabes quién tendrá las mejores ofertas. 😉

En el caso de que llegues en coche, deberás dejarlo en el aparcamiento de Piazzale Roma, puesto que Venecia no admite tráfico rodado (¡incluidas bicicletas!). Esto te costará 24-29€ diarios dependiendo de las dimensiones de tu vehículo. Puedes obtener más información en esta página.

En mi opinión, la mejor forma de viajar a Venecia, si ya te encuentras en Italia, es utilizando el tren. Si conoces las fechas de tu viaje con suficiente antelación puedes ahorrar mucho comprando los billetes con tarifas economy o super-economy online en la página web oficial de Trenitalia.

Este transporte funciona muy bien en Italia, aunque no te librarás de los ocasionales retrasos. La buena noticia es que, si por culpa de un retraso en los horarios del tren, pierdes la conexión, te asignarán al siguiente tren que parta hacia el mismo destino sin coste adicional. Sólo tendrás que acercarte a la oficina de la estación. Eso sí, dibuja la mejor de tus sonrisas y habla con cortesía. Relájate y recuerda, estás de vacaciones.

Cómo moverte

Mi recomendación personal, camina. Pasea por sus calles, es la mejor forma de conocer esta ciudad y no perderte sus detalles.

Si la idea de navegar por sus canales es muy tentadora para ti, existen cuatro opciones.

• La opción más cara, romántica y famosa, es contratar un tour privado (su precio dependerá de su duración) en una góndola. Si estás intentando viajar por poco dinero, no contemples esta opción, a no ser que estés dispuesto a viajar en minigrupo (6-8 personas).
• Usar un taxi acuático es la opción más rápida de llegar de un sitio a otro, pero claramente caro en comparación con los siguientes transportes públicos.
• Adquirir por 7€ un billete para viajar en vaporetto, un equivalente acuático del autobús urbano. Es el transporte más usado por los turistas, ya que con él puedes, no sólo surcar el gran canal, sino también llegar a otras islas de la laguna, como Lido, Murano o Burano. Puedes ver las líneas de vaporetto aquí.
• El traguetto es una góndola, algo más grande que las privadas, que cruza de una orilla a otra el gran canal por las zonas donde no hay puentes. Sólo funciona durante el horario laboral, realizan trayectos cortos de 2-3 minutos de duración y cuestan muy poco (1 o 2€ por trayecto). Son usados, sobre todo, por lugareños, los cuales podrás distinguir porque realizan el viaje de pie. Si quieres vivir la experiencia de subir en una góndola sin gastar demasiado dinero, ésta es tu mejor opción.

Dónde dormir

Los alojamientos dentro de Venecia son bastante caros, aunque los precios son más reducidos en temporada baja. Existe la posibilidad de dormir en las afueras, en una zona continental llamada Mestre. Con esta opción ahorrarás dinero, pero dependerás de los horarios de trenes para volver a tu alojamiento.

Sin embargo, al menos una vez en la vida, merece la pena dormir en la ciudad y disfrutar también de los paseos nocturnos o de madrugada, cuando las calles se vacían de turistas y los canales adquieren nuevos matices llenos de misterio. Si tienes suerte, verás la niebla levantarse poco a poco del lecho de la laguna para descubrir los majestuosos palacios venecianos a primera hora de la mañana.

Es posible encontrar alojamientos de precio medio si reservas con bastante antelación en los meses de invierno. Nosotros nos alojamos en el Hotel Río Venice, en el barrio de Santa Croce, bastante tranquilo en lo que se refiere a turismo. En temporada baja puedes encontrar habitación para dos personas por 70-80€ la noche, toda una ganga tratándose de Venecia.

El lugar ha sido renovado recientemente, por lo que está muy nuevo, tiene habitaciones amplias, camas cómodas y el nivel de limpieza es impecable. Aunque no ofrecen desayuno en sí mismo, ponen a tu disposición productos básicos (galletas, cereales, zumos de bote, cafetera, biscotes, etc) con los que tomar un desayuno bastante simple. Puedes complementarlo comprando leche, pan o bollería. Ofrecen tres habitaciones con baño privado exterior.

En general, es un alojamiento 100% recomendable, con una buena relación calidad/precio. El único punto negativo son las cerraduras instaladas en las puertas de las habitaciones y los baños, bastante ruidosas. Pero, por lo demás, es perfecto.

Nuestra primera reserva, en el B&B Abatea, situado en el quartiere de San Marco, fue cancelada sin razón justificada por los dueños del B&B un mes antes de nuestro viaje. Habríamos perdido mucho dinero si no hubiéramos hecho la reserva a través de Booking.com, pues fueron ellos los que forzaron al B&B a darnos una segunda opción por el mismo precio/condiciones. Nos ofrecieron por el mismo precio el Hotel Rio Venice, aunque, debido a que su situación no era tan céntrica, conseguimos rebajar algo el precio.  La próxima vez, reservaré directamente en Rio Venice, ya que la atención recibida por el B&B Abatea pudo ser mejor, en mi opinión.

Qué ver

¿Cómo resumir esta pregunta? No creo que ni siquiera un veneciano de toda la vida haya descubierto cada rincón mágico que esconde esta ciudad. Mi principal consejo:

Piérdete

Está claro que querrás ver todo aquello que ha hecho famosa a Venecia, los lugares más turísticos, como el quartiere de San Marco. Pero si de verdad quieres maravillarte y enamorarte de ella, déjate llevar.

No mires el mapa, sólo sigue tus pasos, toma puentes estrechos, calles intrincadas, sin saber qué encontrarás a la vuelta de la esquina.

Son estos paseos los que harán que tus pupilas se dilaten, abras mucho los ojos y exclames ¡uala!, ¡buah!, ¡guau! o ¡mira!

Momentos como salir de una calle muy estrecha y ver, al otro lado de un pequeño canal, una plaza iluminada sobre la que se erige hacia el cielo una iglesia de mármol, a modo de catedral, de la cual nunca habías escuchado hablar. O cuando cruzas un puente y ves numerosos palacios antiguos a tu alrededor, con colores gastados por el paso del tiempo, con ventanales y balcones que invitan al reposo y la contemplación.

Unas flores aquí, unos tapices cubriendo estas paredes, un gondolero paseando a una pareja se pierde bajo los puentes más adelante… Pequeños negocios llenos de curiosidades, máscaras, tintes para el cuero, libros antiguos… Todo suma en la belleza y el misterio de estas calles. Si tuviera que elegir la zona que más me gustó, diría el quartiere Castello, poco visitado en comparación con los demás y precioso.

En resumen, piérdete y encuentra maravillas a tu paso.

Hay determinados lugares dignos de mención, o curiosos, que quizás quieras buscar. He marcado los más atractivos en el mapa y a continuación te enumero algunos de ellos.

• Basílica de San Marco. La entrada es gratuita. Si llevas mochila debes dejarla en la taquilla (mira en el mapa más abajo para saber dónde está) antes de hacer la cola para entrar. Este servicio también es gratis. Es ampliamente conocida, aunque quizás lo que no sepas es que, a no ser que se trate de un día especial, a las 11.30 de la mañana encienden las luces. Encontrarse en su interior dorado cuando esto sucede, merece la pena.
• Puente de la Academia. Lugar perfecto para ver amanecer.
• Puente de Rialto y las vistas del mismo. A principios del 2016 el puente estaba en obras, cubierto por completo de plásticos y andamios. Cuando las obras se terminen, volverá a merecer la pena pasear a orillas del gran canal admirando su belleza.
• Puente dei Pugni. Sobre él verás unas baldosas en forma de huellas. Son las marcas donde se posicionaban los luchadores, procedentes de familias enfrentadas, para comenzar las sangrientas peleas que tenían lugar hace cientos de años. Una góndola-frutería se posiciona junto a él cada día para vender sus productos.
• Librería Acqua Alta. Esta curiosa librería está repleta, a reventar, de libros de todos los estilos que puedas imaginarte, de primera y segunda mano. Muchos de ellos están apilados sobre góndolas dentro del propio comercio, o bañeras, debido a que, cuando el agua sube, la librería suele inundarse. Si vas hasta el fondo del establecimiento, saldrás a una pequeña terraza dónde han acondicionado unas escaleras con los libros más viejos y húmedos, ya inutilizables. Súbete a ellas y disfruta de las vistas.
• El puente Chiodo. Es uno de los últimos puentes de Venecia sin barandillas. A mí me pareció encantador.

Si tienes suficiente tiempo (más de dos días), quizás quieras visitar otras islas de la laguna. Son notables las siguientes:

• Murano. En esta isla se produce el famoso y exclusivo cristal de Murano. Puedes realizar tours guiados (con transporte incluido) donde te mostrarán cómo los maestros cristaleros realizan sus obras. Si vas a comprar algún recuerdo de cristal Murano (de precio bastante elevado, por cierto), cuidado con las imitaciones. Busca el sello de autenticidad.
• Burano. Esta es una curiosa isla, llena de casas de colores, tremendamente fotogénica. Hará las delicias de cualquier fotógrafo profesional o aficionado en un día soleado.

Si has seguido mi consejo y la visitas durante el invierno, debes también saber qué hacer en Venecia cuando llueve. Aquí te dejo mis recomendaciones:

• Entra en el restaurante/bar/cafetería que encuentres más apetecible a tu paso. Una taza de té, un buen café negro, una copa de vino del Véneto junto a un plato casero de pasta o arroz con marisco o pescado. Busca una mesa junto a la ventana y disfruta de Venecia bajo el agua. Tómate tu tiempo y relájate.
• Visita las decenas de iglesias, museos, palacios y galerías que contiene esta maravillosa ciudad. Si te gusta el arte, estás de suerte. En esta página encontrarás las principales atracciones de este tipo. No tengo claro que comprar un bono (Venice Card) o reservar online merezca la pena en temporada baja, cuando las colas no son demasiado largas.
• Ponte el chubasquero o abre tu paraguas; y camina. Las calles se vacían, se puede escuchar la lluvia cayendo sobre los canales, la atmósfera se transforma… No te lo pierdas.

Dónde comer

¿Sabías que el cóctel de moda italiano, Spritz, es originario de Venecia? ¿Y tenías idea de que el tiramisù también es veneciano? ¡No puedes marcharte de la ciudad sin haber probado ambos!

Un sitio famoso por su tiramisù para llevar es la tienda I Tre Mercanti (puedes ver su localización en el mapa al final de esta entrada). Si estás por la zona y te apetece algo dulce… ¡no lo dudes!

En Venecia los precios de los restaurantes son más elevados de lo normal, pero existen varios trucos para reducir el gasto en comida.

Por ejemplo, cuando cae la noche, puedes cenar a base de cichetti, unos pequeños platos similares a tapas o montaditos, que cuestan de 1 a 2 euros cada uno, perfectos para acompañar con un Spritz, copa de vino o refresco. Son muchos los bares que ofrecen estos aperitivos cuando cae la noche (normalmente de 6.30 a 8 de la noche).

En especial, puedo recomendarte la Hostaria Vecio Biavorol, los cuales tienen uno producto de primera calidad, combinaciones de sabores deliciosas y originales (pesto de pistacho y mortadela, queso con salsa de tartufo, gorgonzola con nueces…), y todo a muy buen precio. Además, preparan un Spritz barato y buenísimo, ¡doy fe de ello! Hay poco sitio donde sentarse (siempre en barra alta), así que mejor si llegas temprano. Nosotros cenamos allí por 27€/pareja, y no nos privamos de nada.

Al medio día, los restaurantes ofrecen menús a buen precio, así que podéis aprovechar para comer bastante y bien por menos dinero. Son típicos de esta zona los platos con pescado y marisco, como la pasta con almejas o mejillones (vongole y cozze, en italiano), o el risotto de marisco.

Éste último está espectacular en el restaurante ai Barbacani, un lugar precioso y acogedor donde comimos los dos por 62€. Si podéis permitíroslo, no os perdáis su tiramisù casero.

Presupuesto

• Transporte: 112€ de tren Génova-Venecia ida y vuelta (56€ por persona).
• Alojamiento: 92€ gracias a la oferta (23€ por persona y noche).
• Comida: 164.6€ (41.15€ por persona y día).

En total, durante nuestro fin de semana para dos en Venecia, gastamos 368.6€; es decir, 92.2€ por persona y día.

Pues ya sólo te queda descubrir esta maravillosa ciudad por ti mismo.

Si ya la has visitado y te preguntara cuál es tu rincón favorito, ¿serías capaz decirme sólo uno? Déjame tu opinión más abajo, me encantaría saber qué piensas.

Links de utilidad

• Hotel Río Venice.
• B&B Abatea.
• Otras ofertas hoteleras en Venecia.
• Buscadores de vuelos: Trabber, eDreams, Momondo y Vueling. 
• 5% descuento en IATI seguros.
• Reserva de actividades guiadas en Venecia.

Puedes leer sobre más lugares de ensueño en Italia en otras entradas de este blog, como:

• Un paseo por Florencia.
• Fin de semana en Roma.
• Ruta en coche por Siena y el Val d’Orcia.
• La Abadía de San Galgano en la Toscana.
• Ruta por el lago de Como.
• El parque natural de la Maremma y sus playas vírgenes.
• Bolonia, la ciudad de los soportales.
• Ruta por Umbria, la vecina secreta de la Toscana.
• Las maravillas de la Costa Amalfitana.
• Descubre las 5 Terre de pueblo en pueblo.

Y recuerda, si tienes cualquier duda o  necesitas algún detalle más que no haya comentado, escríbeme y te ayudaré encantada en todo lo que esté en mi mano.

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