Descubre el Awaawapuhi Trail: La costa Napali a tus pies

Uno de los paisajes más bellos del mundo, la costa Napali, estará bajo tus pies cuando llegues al final de la ruta Awaawapuhi, en Kauai (Hawaii).

Kauai es la isla con más historia de Hawaii accesible al turismo, y, a pesar de eso, una de las que menos visitas recibe.

Es una isla volcánica, pero no esperes ríos de lava ni efectos pirotécnicos. Hace siglos que su volcán cayó en un sueño eterno.

Ahora, es sólo cuestión de tiempo (mucho tiempo) para que los fenómenos meteorológicos desgasten su perfil hasta convertirla en pequeño atolón de arena y coral cubierto por el océano.

Tranquilo, ¡estás de suerte! Te ha tocado vivir en una época en la que Kauai es la isla más hermosa, remota y misteriosa de todo el Pacífico.

Aunque esto pueda depender de gustos, decenas de superproducciones como las de Jurassic Park, King Kong, Indiana Jones o Jurassic World la eligieron como escenario.

¿Necesitas más pistas?

Cuando cierras los ojos e intentas recordar qué ven los personajes de Parque Jurásico cuando llegan en helicóptero o barco, a la isla, ¿qué ves? ¿Recuerdas la montaña verde, surcada por vetas de roca a modo de cuchillas?

Pues es real. Existe, está en el planeta Tierra, al alcance de tu mano (más o menos).

¿Vas a quedarte sin verla? 

En concreto, las imágenes de las que hablo fueron rodadas en la costa Napali, la más hermosa e inaccesible de toda la isla.

Ninguna carretera te llevará a ella. Para acercarte a sus secretos deberás andar, volar y surcar los mares.

Y, a pesar de tus esfuerzos, nunca conseguirás desentrañar todos sus misterios. ¿O sí? ¿Te atreves a intentarlo?

A continuación, voy a darte algunos consejos y contarte nuestra aventura en el Awaawapuhi Trail, una de las mejores ventanas a la costa Napali.

Debido a las inclemencias del clima, fue uno de los pocos senderos que recorrimos durante nuestra visita a Kauai, en Noviembre del 2016.

Awaawapuhi Trail

Datos prácticos

• Encontrarás un aparcamiento cerca de la milla 17 de Kokee Road desde el cual parte esta ruta.
• Son 6.2 millas i/v (unos 10 km), que descienden un total de 360 m hacia el Nualolo Valley.
• Es necesario reservar unas 4 horas para realizarlo.
• Tiene un nivel de dificultad medio-alto.
• Transcurre, en gran parte, bajo la sombra de los árboles.
• El camino es de tierra, mayoritariamente fango, al menos en nuestro caso.
• La ida es de bajada y, por lo tanto, el regreso se torna cuesta arriba. Sin embargo, su dificultad relativa vendrá determinada por el estado del terreno. Si el suelo está enfangado por la lluvia, es mucho más difícil descender que subir. El peligro de resbalar y caer es muy alto en este caso, por lo que te recomiendo llevar un buen calzado, ir despacio dando pasos cortos y, a ser posible, usar un bastón de senderismo o buscar una rama para usarla de apoyo al caminar. Cuando el terreno está seco, la subida es más dura a causa de la alta humedad y la temperatura.

El camino

Durante la primera mitad del sendero tuvimos que tener mucho cuidado de no caer. Si pasáis por la señal de milla 0.5, acordaos de mí, ¡ahí mordí el polvo! O el barro, mejor dicho.  🙂

Cruzamos bosques de helechos gigantes preciosos y caminamos la mayor parte del tiempo rodeados de árboles. Éstos nos protegieron bastante de la lluvia suave, aunque continua, que nos perseguía desde el aparcamiento.

Más o menos a mitad de camino, el suelo empezó a ganar consistencia bajo nuestros pies. Dejó de llover y el sol empezó a filtrarse a través de las nubes para formar arcoíris a nuestro paso.

No has visto un arcoíris de verdad hasta que no lo has visto en Hawaii.

Son reales, enormes, casi tangibles. Cuando los tienes enfrente, no puedes sino agradecer a la lluvia que te acompañaba por haberlo provocado. El paisaje, ya de por sí solo fascinante, multiplica su atractivo de forma incalculable gracias a ellos.

Justo antes de llegar al mirador, cruzas un campo de espigas muy evocador, como puedes apreciar en uno de los clips del vídeo  embebido a continuación.

La meta

Y entonces, llega el momento mágico.

El suelo se abre bajo tus pies y deja al descubierto los valles característicos, abrazados por montañas erosionadas a lo largo de los años en forma de cuchillas suaves, delicadas.

El color del mar, las nubes, pájaros majestuosos volando entre acantilados… y esas formas imposibles en la roca.

Y, por si fuera poco, un arcoíris poniendo el broche final a la estampa.

Pero… sí, hay un pero.

La valla del mirador oficial ofrece vistas limitadas del paisaje.

Para disfrutarlo por completo, es necesario adentrarse en una zona polvorienta sin ningún tipo de protección.

Todas las señales, tanto externas como internas (si tienes dos dedos de frente) te instan a no hacerlo.

Nosotros tuvimos suerte de que no estuviera mojada. En caso contrario, no habría  sido posible caminar por ella sin peligro a caer.

Conforme avanzas, el paisaje gana espectacularidad al mismo ritmo que aumenta el riesgo de poner tu vida en peligro. Y estoy siendo muy sincera.

Los primeros metros en esta zona no son tan peligrosos. El terreno aún es ancho y, si está seco, puedes dar unos pasos sin sufrir demasiado. A ambos lados, la perspectiva de los valles empieza a abrirse, y es increíble.

Mi recomendación, no pases de ahí.

Para continuar,  tuve que cruzar, de una zona a otra, agachada y a cuatro patas. Lo hice a pesar del precipicio que caía a ambos lados y superando inicios de vértigo, lo cual no había sufrido antes.

De nuevo aquí, el paisaje se tornó aún más espectacular.

Más allá de esa segunda parada que nunca sobrepasé, se extendía un estrecho camino de polvo que no llegaba a tener más anchura que mis caderas.

Y sí, las vistas eran sensacionales, aunque de alto riesgo. No sólo estaba el peligro de sufrir  vértigo, sino además, de tropezar y caer. El terreno no dejaba opción a errores.

A pesar de todo esto, mi fotógrafo llegó al final del ‘mirador no oficial’ y tomó estas sensacionales fotos. ¡Espero que las disfrutes!

El regreso

A la vuelta, nos dimos cuenta de que el clima no había variado en absoluto. Cada tramo del sendero mantenía la misma condición que por la mañana.

La zona más cercana al mar seguía seca, con el cielo despejado. Por el contrario, en los últimos  kilómetros y en el aparcamiento,  continuaba lloviendo algo más fuerte, incluso. Debido a esto, la concentración de fango era aún mayor. Sin embargo, al ser cuesta arriba, fue mucho más fácil andar por él sin caídas.

Decidir entre Awaawapuhi o NualoloTrail

El Nualolo Trail parte de un aparcamiento situado en la entrada al Kokee Natural History Museum, entre las millas 15 y 16.

Es tan famoso, o más, que el Awaawapuhi Trail. Hace unos años, existía una ruta intermedia, denominada Nualolo Cliff, que los conectaba. Esto permitía empezar por uno y regresar por el otro en el mismo día, disfrutando así de ambos paisajes.

Por desgracia, hoy en día el Nualolo Cliff Trail está cerrado ya que fue destruido por unos desprendimientos. Cliff significa acantilado, por lo que no es de extrañar que este camino acabase desprendiéndose.

Así que, para hacer ambos senderos, es necesario reservar dos días, si es que los tienes.

Yo dudé mucho tiempo sobre cuál de los dos recorrer y al final, el horario decantó la balanza. Aquí te enumero las diferencias entre ambos, tanto las que sabía al inicio como las que aprendí allí mismo, de primera mano.

Espero que puedan ayudarte a decidir, en el caso de que, como yo, no tengas tiempo para realizar los dos.

• Nualolo Trail es algo más largo: 12 kilómentros, frente a los 10 de Awaawapuhi.
• El desnivel que salvas en Nualolo es mayor: 435 frente a 360 metros en Awaawapuhi.
• Según dicen, Nualolo Trail disfruta de menos sombra que Awaawapuhi.
• También me contaron que el Nualolo Trail se considera más duro, más rompe-piernas, porque tiene subidas y bajadas durante todo el camino. Awaawapuhi es, en esencia, bajada a la ida y subida a la vuelta.
• Las vistas son igualmente hermosas, del mismo valle; aunque la perspectiva es algo distinta. Desde el mirador en Awaawapuhi, ves dos valles por el precio de uno, ambos bajo tus pies, con el mar al fondo. Desde el Nualolo, ves un valle desde el lateral, lo que permite vislumbrar la costa Napali recortada detrás de él, sobre el Pacífico. Por mucho que comparé fotografías de uno y otro, no supe decidir cuál prefería. Demasiado personal, deberás elegir tú.
• En peligrosidad para ganar vistas al final del sendero, me aventuraría a decir que el Awaawapuhi es peor. Esto variará dependiendo de las condiciones del terreno y los riesgos que tú estés dispuesto a correr. Por favor, usa la cabeza.

Consejos prácticos

Qué llevar

A continuación te dejo una lista de elementos básicos que deberían acompañarte siempre durante tu visita a Waimea Canyon & Napali Coast:

• Capa de lluvia y/o chubasquero. En Kauai se encuentra el segundo punto más húmedo del planeta, el monte Waialeale. Por lo tanto, será muy extraño que pases por aquí y no te caiga encima algún chaparrón. Una chaqueta impermeable te vendrá muy bien para cortar el viento, mantener la temperatura y protegerte de la lluvia. Sin embargo, cuando comiencen las grandes trombas de agua (pasajeras, no te asustes), la capa te será muy útil, ya que no te cubrirá sólo a ti, sino también a tu mochila y tu preciado equipo fotográfico. Nosotros hicimos buen uso de ambas.
• Calzado apropiado para montañismo. Vi a muchas personas haciendo trekking en chanclas de dedo, y te lo aseguro, no parecían estar pasando un buen rato. Yo te recomiendo botas de montaña con tecnología goretex o similar, impermeables al agua. Esto será muy útil cuando tengas que sacar todo el barro pegado a ellas sin mojar su interior… Te lo digo por experiencia. También vi que algunos turistas llevaban un tipo de calzado con suela apropiada para caminar por aquellos parajes, pero abiertas en cierta medida, como éstas. Son mucho más fáciles de lavar, ligeras y apropiadas para ambientes cálidos como Hawaii. Si volviera a ir ahora mismo (¡ojalá!), me haría con unas zapatillas de este estilo sin dudarlo.
• Ropa ligera. A ser posible, viste con algo que se seque con rapidez. En mi opinión, los pantalones cortos serán más cómodos, ya que no se ensuciarán tanto con el fango como unos largos.
• Comida y bebida. Si vas a realizar una caminata, provéete de suficiente agua (1-1.5 litros por persona mínimo) y comida. No encontrarás agua potable en los baños. Además, los únicos lugares cercanos para comprar comida y bebida son un pequeño puesto en el mirador Waimea Canyon Lookout y el restaurante que se encuentra junto al museo, donde los precios serán altos y las opciones limitadas. Es mejor llevar todo desde casa. Las barritas de cereales con miel y los frutos secos son excelentes píldoras de energía fáciles de transportar. Añade un par de bocadillos y alguna pieza de fruta y estarás preparado para la aventura.

Qué no llevar

En Hawaii, como en casi cualquier otro sitio del mundo, son habituales los robos dentro de los coches. La Kokee Road es un buen ejemplo de ello. Éstos son los pasos que debes tener en cuenta para no perder tus efectos personales:

• No dejes nunca tu equipaje ni objetos de valor dentro de un coche aparcado. Llévalo todo contigo.
• No olvides ningún ítem, por insignificante que sea, a la vista. Estarás tentando a la suerte.
• No estaciones en aparcamientos donde ya haya cristales rotos en el suelo. El mundo te está dando una señal.
• Si, por algún extraño motivo, necesitas dejar algo de valor en el maletero (no te lo recomiendo en absoluto), no lo abras en el parking. Déjalo todo bien guardado en él antes de salir de tu alojamiento y no vuelvas a abrirlo. En la carretera, compórtate como si no llevaras nada. Esto podría resultar si sólo vas a pararte en los miradores durante unos minutos. Sin embargo, es de alto riesgo si vas a dejar el coche estacionado mientras realizas una ruta larga de senderismo.

A nosotros, siguiendo los tres primeros consejos enumerados aquí arriba, no nos abrieron el coche. Pero, de nuevo, es cuestión de suerte.

Links de utilidad

• Ofertas de Booking en Kauai.
• Solicitud del ESTA.
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Si te interesa saber más sobre Kauai, aquí tienes toda la información que recopilé durante nuestra visita en la isla:

• 9 días de ruta por Kauai, paso a paso. 
• Guía práctica para organizar un viaje a Kauai por tu cuenta.
• Descubre la costa Napali en un barco de lujo.
• Kalalau Trail, el trekking más exigente de Kauai.
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• Sobrevuela Kauai en un helicóptero… ¡sin puertas!
• Waimea Canyon, el Gran Cañón del Pacífico.
• Queen’s Bath, belleza prohibida en el jardín del Edén.
• Mahaulepu Trail, senderismo, templos y playas vírgenes en Kauai.

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• 7 días de ruta por Maui.
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Y recuerda, si necesitas más información o ayuda sobre Hawaii, no dudes en dejar un comentario más abajo. Te ayudaré encantada en todo lo que esté en mi mano.

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