Recorrer el Road to Hana a tu ritmo y descubrir en él los rincones más hermosos e inaccesibles de Maui debería estar en tu lista de imprescindibles cuando organizas tu viaje a la isla más romántica de Hawaii.
Aquí te explico cómo organizar tu visita para disfrutarla sin agobios ni aglomeraciones.
Cómo organizar tu recorrido por el Road to Hana
Cuándo ir
La época del año no es importante. Si vas a Maui, tienes que ver con tus propios ojos el lado más inaccesible de la isla.
Si realizas la típica ruta por el Road to Hana, empezarás de madrugada, conducirás desde Paia a Hana durante unas 3 horas en un tráfico denso (todos están haciendo lo mismo que tú), harás varias paradas obligadas durante el trayecto, y volverás al atardecer con atascos muy parecidos a los que encontraste a la ida.
Yo te sugiero una alternativa anti-aglomeraciones que funciona:
- Pon rumbo a Hana después del almuerzo, sobre las 12:00-14:00 del medio día. Notarás que el tráfico es mucho más fluido a esa hora.
- Haz sólo paradas cortas, nada que requiera trekking. Quieres llegar a tu destino con algo de luz.
- Pasa la noche en Hana o alrededores.
- Al día siguiente, levántate temprano y visita la zona cercana cuando aún hay pocos turistas: Pipiway Trail, O’hoe Gulch, Black Sand Beach Park, la playa de Hamoa, Kahanu Garden, los tubos de lava, etc…
- Vuelve a pernoctar en tu alojamiento.
- El tercer día, deshaz poco a poco el Road to Hana desde primera hora del día. Aprovecha este momento para pararte en otros lugares del recorrido que no tuviste tiempo de ver a la ida. Habrá gente en ellos, pero casi nada de tráfico en tu carril.
Dónde dormir
El precio de los hoteles en Hana y alrededores es bastante elevado, debido a la poca oferta y alta demanda. Así que, si quieres dormir en un hotel, te recomiendo reservarlo con mucha antelación.
En el caso de que tu presupuesto sea menor (como en nuestro caso), échale un vistazo a las ofertas de Airbnb.
Nosotros reservamos el apartamento Relaxing Oceanfront getaway in Hana por 267€/2 noches.
Se trata de dos casas rústicas adosadas frente al mar, que se alquilan por separado. Cada una de ellas cuenta con dormitorio, baño completo (lavadora incluida), cocina/salón con todo lo necesario y, lo más importante, un lanai o terraza para disfrutar de atardeceres y desayunos al son de las olas.
No esperes ningún tipo de lujo, solo un lugar auténtico, autóctono y aislado de las multitudes. Es probable que encuentres algún tipo de insecto (no fue mi caso, aunque he leído varias reseñas comentándolo). Esto no es extraño, ya que el alojamiento está inmerso en la naturaleza. En realidad, es uno de sus encantos.
Eso sí, si no puedes con los bichos, tendrás que buscar otras opciones.
La comunicación con los dueños es escasa o nula, pero no te preocupes. Encontrarás tu nombre en la puerta del apartamento, las llaves sobre la mesa de la entrada y mucha información práctica dentro del piso.
No necesitarás añadidos, acabas de llegar a un paraíso natural.
¿Quieres algo aún más económico? Hay varias zonas de acampada, como las que encontrarás junto a Black Sand Beach y Kipahulu Valley.
Dónde comer
Nosotros compramos comida para 3 días en el supermercado biológico Maná Foods en Paia. Y lo mejor es que tienen platos calientes recién preparados. Por 12$/persona, nos dio para almorzar y cenar el primer día: verduras a la plancha, arroz, tofu al curry, pollo, tallarines, vainas… Todo delicioso.
El resto de la cesta fue fruta, pan, queso, tomates, aguacate, hojas de espinaca, barritas energéticas y frutos secos. Todo lo necesario para la ruta de trekking que teníamos planeada el día siguiente.
Si se te olvida algo, en Hana encontrarás una tienda de ultramarinos, el Hasegawa General Store, con algunos productos básicos.
También probamos la comida del camión-restaurante Ae’s thai kitchen. Por 14$ nos comimos entre dos un pad thai que nos supo a gloria (la cantidad fue más que suficiente).
Qué ver
A lo largo de la carretera que lleva desde Paia a Hana, y más allá, encontrarás túneles naturales, árboles de raíces infinitas, saltos de agua, vistas panorámicas y curvas… muchas curvas.
A continuación te dejo los puntos de interés más conocidos por orden de aparición, aunque hay muchos otros rincones donde te apetecerá pararte a disfrutar del paisaje:
- Ho’okipa Beach Park –Milla 9 (carretera previa).
- Twin Falls – Milla 2 (trekking).
- Waikamoi Ridge Trail – Milla 9.5 (trekking).
- Garden Of Eden Arboretum – Milla 10 (15$).
- Kaumahina State Wayside Park – Milla 12 (vistas).
- Honomanu Bay – Milla 14 (no recomendable bajar, 4×4 obligatorio).
- Ke’anae Arboretum – Milla 16.7 (eucaliptos arcoiris, entrada gratuita).
- Halfway to Hana Stand – Milla 17 (puesto de comida).
- Wailua Valley State Wayside – Milla 18 (vistas).
- Upper Waikani Falls – Milla 19 (trekking).
- Pua’a Kaa State Wayside Park – Milla 22 (cataratas, trekking).
- Hanawai Falls – Milla 24 (junto a la carretera).
- Nahiku MarketPlace – Milla 29 (puestos de comida)
- Hana Lava Tubes – Milla 31 (12$, trekking tubos de lava).
- Kahanu Garden – Milla 31 (Pi’ilanihale Heiau, templo más antiguo de Hawaii).
- Wai’anapanapa State Park & Black Sand Beach – Milla 32 (gratis).
- Hana – Milla 34.
- Red Sand Beach – Milla 34 (peligroso llegar a ella).
- Koki Beach – Milla 51 (sólo surfistas muy experimentados).
- Hamoa Beach – Milla 50 (apta para el baño).
- Wailua falls – Milla 45 (carretera).
- Seven Sacred Pools / Ohe’o Gulch – Milla 42 (10$, Haleakala National Park).
- Pipiwai Trail y Waimoku Falls – Milla 42 (10$, Haleakala National Park).
- Palapala Ho’omau Church – Milla 41 (iglesia).
He marcado en negrita los lugares que visitamos durante nuestra ruta de dos días por el Road to Hana. ¿Quieres saber si acertamos? Ahí va.
Nuestra selección
A pesar de que pasamos 3 días y 2 noches en el Road to Hana, no vimos todos los puntos de interés que acabo de nombrarte.
¿Podría habernos dado tiempo? Es posible. Sin embargo, ya sabes que prefiero disfrutar más de menos, o lo que es lo mismo, el slow-traveling.
Ho’okipa Beach Park
Esta preciosa playa es famosa entre los surfistas. Si aparcas en la zona superior, tendrás vistas panorámicas a la costa.
Aunque, en mi opinión, el mayor tesoro de este lugar está en las decenas de tortugas verdes que llegan a su orilla para descansar sobre la arena.
Baja a la playa y dirígete a la esquina derecha (mirando al mar).
Ten cuidado donde pisas, ve despacio. A primera vista, pueden parecerte rocas volcánicas. Fíjate bien. Te darás cuenta de que, en realidad, la costa está tomada por tortugas verdes echándose la siesta.
Solo tienes que hacer caso a los letreros, pero, por si acaso, te lo recuerdo aquí:
No te acerques demasiado a ellas ni hagas nada que las moleste. De su descanso en la orilla depende, tanto que vuelvan a ella, como que sobrevivan cuando regresen al mar. Además, la ley de Hawaii está de su parte. Así que, si quieres verlas muy de cerca, por favor, usa el zoom de tu cámara.
Una verdadera maravilla para los amantes de estos animales. Como no podía ser de otra manera, nosotros paramos dos veces en esta playa, una a la ida y otra a la vuelta.
Kaumahina State Wayside Park
Aunque las vistas de la costa que ofrece este mirador son muy hermosas, si vas con prisas o con tu agenda muy llena, no creo que sea uno de los lugares imprescindibles del Road to Hana.
Hanawai Falls / Wailua Falls / …
Cada una de las cataratas que encontrarás a lo largo del camino es especial:
Varios saltos de agua, lecho volcánico, dos ríos que convergen, pozas que invitan a zambullirse…
En resumen, sentirás la tentación de pararte cada 2 x 3.
Eso sí, intenta no frenar el tráfico cuando lo hagas. Hay escasez de aparcamientos junto al arcén y, por si fuera poco, la carretera suele convertirse en un puente de un único carril cuando pasa sobre estos ríos.
Ke’anae Arboretum
No conseguimos visitar este jardín botánico gratuito a la ida, ya que la puerta de entrada está muy camuflada en la vegetación. Además, la zona de aparcamiento es diminuta y se encuentra en el lado contrario de la carretera.
A la vuelta, con más calma, encontramos el acceso (marcado en el mapa al final de esta página) y conseguimos ver, entre otros muchos ejemplares, los famosos eucaliptos arcoiris (rainbow).
Un par de consejos: ten cuidado al cruzar la carretera desde el parking y asegúrate de llevar el repelente de mosquitos contigo.
Waianapanapa Black Sand Beach
Esta sí es una de las localizaciones imprescindibles del Road to Hana.
Un mar azul intenso chocando contra una costa negra hecha de rocas volcánicas y la vegetación poniendo el broche final al color de esta estampa.
No salía una sola foto fea. Daba igual si movía la cámara, se mojaba el objetivo con la espuma de las olas o torcía el careto en la selfie… Nunca he visto un telón de fondo tan fotogénico. Así que, ahórrate las excusas.
Si recorres el Road to Hana, tienes que parar en Wai’anapanapa Black Sand Beach, sí o sí.
Cuando fuimos nosotros, el acceso a la playa estaba cerrado por marejada. Sin embargo, sí se podía caminar por el parque y tomar perspectiva sobre la costa.
En el aparcamiento vimos varias mangostas correteando entre basuras, huyendo de los turistas de forma descarada y peleándose entre ellas.
Y cuando pones en un mismo lugar:
Animales en libertad + localización preciosa + varios días.
¿Sabes qué ocurre?
Efectivamente, ¡la visitamos un par de veces! Y es que, no es para menos.
Hana
A parte de pasear por la playa de Hana, no vimos mucho más de este pequeño pueblo:
- Descartamos llegar hasta Red Sand Beach, por tener un acceso peligroso.
- Fuimos andando hasta la tienda de ultramarinos para comprar unas cervezas.
- Disfrutamos del lanai con vistas de nuestro Airbnb durante la puesta de sol.
Koki Beach
Después de recorrer el Pipiway Trail, nuestra intención era darnos un baño en Hamoa Beach, apta para nadar.
Pero, a eso de las 2 de la tarde, aparcar cerca de ella se había vuelto misión imposible, y nos habían avisado de que estaban poniendo multas a los coches mal estacionados. Así que nos dejamos llevar por el camino y llegamos a Koki Beach, una playa solo apta para surfistas experimentados.
Para nuestra sorpresa, aquí encontramos todo el aparcamiento que podíamos desear y descubrimos una costa solitaria, franqueada por una bella pared veteada de tierra y rocas rojizas.
Un remanso de paz donde lo único que se escuchaba era el constante rugido de las olas en la orilla.
Pipiwai Trail y las 7 piscinas sagradas de O’hoe Gulch
¿Otra recomendación de imprescindibles en el Road to Hana? Aquí la tienes.
Ambos se encuentran englobados en el valle Kipahulu, el cual forma parte del Haleakala National Park.
Si quieres saber más detalles, te lo cuento todo con pelos y señales en la entrada que dediqué por completo al sendero Pipiwai y las 7 piscinas sagradas de O’hoe Gulch.
Vídeo
¿Te apetece darte un paseo de menos de 4 minutos por el Road to Hana? Aquí tienes un resumen/aperitivo, ¡qué lo disfrutes!
Precauciones
- Asegúrate de llevar el depósito lleno. Encontrarás una gasolinera en Paia y otra en Hana (ambas con un precio superior al del resto de la isla).
- Conduce despacio, disfrutando del paisaje y apartándote para dar paso a camiones o vehículos más voluminosos que tú.
- En zonas estrechas, de un solo carril, deja pasar a quien haya llegado antes y saluda con la mano cuando te den paso. No toques la bocina, es de mala educación en Hawaii.
- No aparques en zonas donde veas cristales rotos en el suelo. Es una pista muy clara de lo que puede ocurrirles a las lunas de tu coche.
- Evita entrar en propiedades privadas, aunque parezca un simple bosque. Solo tienes que prestar atención a los carteles.
Presupuesto
En 3 días/2 noches de ruta por el Road to Hana, nuestros gastos fueron:
- Alojamiento Airbnb: 267€ (66.75€/persona y noche).
- Entrada al Pipiway/O’hoe Gulch: 20$.
- Comida: 137€ (supermercados + comida preparada).
- Alquiler coche (3 días): 97,5€ (32,2€/día).
- Gasolina: 30€ (aproximado).
En total, nos gastamos unos 550€, 138€ por persona y noche.
La guía de Maui en PDF
¿Quieres descargarte en PDF toda la información recogida en este blog sobre qué ver en Maui y, mejor aún, cómo hacerlo?
54 páginas que te ayudarán a organizar tu ruta personalizada y disfrutar de Maui a tu ritmo.
¿Te interesa? Entonces, pincha aquí y consigue la guía por solo 1.95€.
Links de utilidad
- Oferta de hoteles en Hana.
- Ofertas de vuelos internacionales a Hawaii: Trabber, eDreams y Momondo.
- 5% de descuento al contratar tu seguro de viajes en IATI desde aquí.
¿De ruta por Maui? Entonces, esto también te interesa:
- La descripción completa de nuestra experiencia en O’hoe Gulch y Pipiway Trail.
- El summit del Haleakala y cómo no ver amanecer en él.
- Las mejores playas de snorkeling al sur de Maui.
- Persiguiendo ballenas jorobadas junto a las costas de Maui.
- 7 días de ruta por Maui.
- Guía para organizar un viaje a Maui por tu cuenta.
¿Quieres conocer otra isla de Hawaii? Mi recomendación, échale un ojo a Kauai:
- 9 días de ruta por Kauai, paso a paso.
- Guía práctica para organizar un viaje a Kauai por tu cuenta.
- Waimea Canyon, el Gran Cañón del Pacífico.
- Kalalau Trail, el trekking más exigente de Kauai.
- Awaawapuhi Trail, la costa Napali a tus pies.
- Sobrevuela Kauai en un helicóptero… ¡sin puertas!
- Las playas más hermosas de Kauai: ¿qué te apetece hacer hoy?
- Descubre la costa Napali en un barco de lujo.
- Queen’s Bath, belleza prohibida en el jardín del Edén.
- Mahaulepu Trail, senderismo, templos y playas vírgenes en Kauai.
Y si aún no tienes claro qué isla visitar en Hawaii, este artículo es justo lo que necesitas.
Si necesitas más consejos sobre cómo organizar tu propia ruta por el Road to Hana, déjame un comentario aquí abajo. Estaré encantada de resolver tus dudas.
Uaaaauuuuu!!! Alucino con las tortugas!!! Otra vez me habéis descubierto un lugar brutal!! Queda apuntado en mi lista de imprescindibles, jajajajaja!!! Bueno, el año pasado me descubristeis Lady Elliot Island y ya he ido (y he alucinado) así que espero repetir experiencia. Gracias.
¡Hola Emma! ¡Qué alegría volver a verte por aquí!
Sí, la verdad es que el Road to Hana está lleno de lugares increíbles. ¡Muy bien apuntado! 🙂
Me alegro de que te lo pasaras bien en Lady Elliot Island. ¡Ay! ¡Qué ganas de volver! Todo se andará…
Un abrazo enorme y muchas gracias por tu comentario.